Higiene bucal. El cepillado

La higiene bucal es una de las formas más efectivas de prevenir la caries o de ayudar a que el proceso sea más lento, una vez ya han aparecido las lesiones.

Con el cepillado, conseguimos eliminar los restos de placa bacteriana formada por los restos de alimentos y las bacterias (los “bichitos”), y con el flúor de la pasta, ayudamos a proteger los dientes frente al ataque de los ácidos que producen las bacterias de la caries (“hacemos los dientes fuertes”).

Recomendaciones de cepillado

Recomendamos el cepillado 2 veces al día, por la mañana y por la noche, y ahora que estáis en casa, también a mediodía.

¡Hay que cepillarse con ganas, no dejar ninguna parte del diente por cepillar y llegar bien a la encía!

Para que se os pase más rápido, ¡lo podéis hacer al ritmo de una canción!

 

Recomendaciones pasta de flúor

Recomendaciones de uso de pasta de flúor: concentración (lo veréis en el tubo de pasta como ppmF) y cantidad.

De 0 a 3 años: Desde que aparece el primer diente, se aconseja usar una pasta de 1000 ppm. Simplemente hay que manchar el cepillo con muy poquita cantidad de pasta.

De 3 a 6 años: Se recomienda aumentar la cantidad de pasta a un granito de arroz, porque los niños aprenden a escupir y ya tienen todos los dientes de leche en la boca. La concentración varía entre 1000 ppm y 1450 ppm, según las condiciones de cada niño. Si tenéis dudas, seguid usando 1000 ppm.

A partir de 6 años: Se aconseja pasta de 1450 ppm. Es la misma concentración de flúor que tienen las pastas de los adultos, pero la diferencia con las de los niños, es que el sabor es más agradable para ellos. A partir de esta edad, se puede poner la cantidad equivalente al tamaño de un guisante.

EdadCantidad de pastaConcentración de F
0 a 3 añosRaspada 1000 ppm
3 a 6 añosGranito de arroz1000 – 1450 ppm
+ de 6 añosGuisante1450 ppm